La ley de atracción consiste en la creencia que los pensamientos conscientes e inconscientes, influyen en las personas, puesto que al ser energía los pensamientos retornan ondas similares.

Actualmente se afirma que la ley de atracción se define con la frase "te conviertes en lo que piensas” lo cual se podría explicar cómo que los pensamientos conscientes e inconscientes de la persona generan los sentimientos, mientras que los sentimientos generan los efectos.

A lo anteriormente escrito en el párrafo superior se le denomina vibraciones armoniosas de la ley de atracción.

La ley de atracción (el secreto) también está relacionada con el hermetismo (conjunto de creencias filosóficas y religiosas basadas en los textos de Hermes Trimegistro) y la teosofía (movimiento filosófico religioso que origino el Teosofismo, el cual afirma tener una inspiración especial para lo divino mediante el desarrollo espiritual).

La ley de atracción últimamente se ha puesto de moda gracias a la película "El Secreto” y un libro con el mismo nombre que la película.

Esta ley de atracción según sus detractores no tiene base científica y los autores han recibido unos generosos beneficios tanto por la película, como por el libro.

Según afirman algunos autores, la procedencia de la ley de atracción viene del hinduismo, a través del cual se relaciona con la teosofía, pero también se relaciona con el judaísmo y la cábala.

La idea moderna de la ley de atracción podemos verla en los libros de varios autores.

1.902 – James Allen, publicó su libro "Piensa como hombre” (As a man thinketh).

1.910 – Wallace Delois Wattles, publico también el libro "La ciencia de hacerse rico”.

1.912 – Charles F. Haanel hizo lo propio con su libro "El sistema de la llave maestra” (The Master Key System).

La ley de atracción nos afirma que por medio del pensamiento es posible conseguir nuestros deseos, por lo cual se asocia a la ley del mentalismo, cuya ley afirma que el universo es una creación mental, donde el hombre, con su pensamiento crea su propia realidad.

Los seguidores de la ley de atracción afirman que las leyes del Universo son benignas, que la ley de atracción es una ley más del Universo que afecta a todos los seres y no es algo que se pueda elegir si se aplica o no.

En una versión moderna de la ley de atracción afirman tener raíces en la física cuántica, los pensamientos generan una energía y para controlar esa energía son necesarias las siguientes condiciones:

-Saber qué es lo que uno quiere y pedirlo al Universo, donde Universo es cualquier cosa que el solicitante considere como su Dios.

-Enfocar los pensamientos sobre el deseo con sentimientos de entusiasmo y gratitud.

-Sentir y comportarse como si lo deseado ya se ha obtenido.

-Estar abierto a recibir el deseo.

Según afirman sus seguidores el pensar en lo que no poseemos, no lo obtendremos jamás, pero si seguimos sus principios, evitando pensamientos negativos, el Universo (muestro Dios particular) satisfará todos nuestros anhelos y deseos.

Djwhal Khul, teósofo tibetano define la ley de atracción como "la ley básica de la manifestación y la ley suprema de este sistema solar”.

Es la ley que equilibra los dos polos, donde la ley de la economía rige el polo negativo y la ley de síntesis el polo positivo.

Los seguidores de la ley de atracción nos dan 12 consejos para enseñarnos a lograr resultados con dicha ley.

1-Leer la información gratuita y nos recuerdan que para que funcione solo hemos de creer en ella.

2-Elimina tus dudas.

3-Define qué quieres lograr.

4-Crea un letrero o un video con lo que deseas y colócalo en algún lugar por el que pases varias veces al día.

5-Enfocate en el sí, piensa en lo que deseas, no en el no, o en que no conseguirás lo que deseas.

6-Visualiza, dedica varios minutos a sentir y disfrutar mentalmente eso que deseas.

7-Realiza afirmaciones.

8-Cuida tu diálogo interno.

9-Sonrie y sé feliz.

10-Agradece lo que tienes.

11-El desafío y registro de señales.

12-Toma acción.